Si buscáis un sitio con encanto para casarse en Navarra, como fotógrafo de bodas no hay mejor lugar que la Bodega Otazu. Situada entre los montes de Echarri y rodeada de sus inmensos viñedos, el lugar crea un ambiente muy acogedor.
Hoy os presento una de estas bodas íntimas y familiares de Carlos y Graciela, que decidieron celebrar su boda en la Bodega Otazu para la que tuve la oportunidad ser su fotógrafo de boda.
La boda empezó sus preparativos, con Carlos en la casa de sus padres en Larraga y Graciela en la casa de la Bodega Otazu, rodeada de su familia que le ayudó a vestirse.
A medio día comenzó la ceremonia en la pequeña ermita que está en la misma zona de la Bodega. Es ideal para los que piensen casarse por la iglesia en un entorno intimo y lleno de encanto, con mucha historia. Los viñedos dejan mucho espacio libre para la inspiración. Una boda en la bodega Otazu es la mejor opciónpara una boda familiar.
Después de la ceremonia los invitados disfrutaron de un delicioso lunch al aire libre entre los olivos de la preciosa terraza, degustando la exquisita gastronomía que ofrece la Bodega con sus picoteos innovadores de alta cocina. El broche de oro lo dejó la música en vivo, una de esas posibilidades para una boda intima que siempre dejan buen sabor de boca.
Mientras los invitados estaban disfrutando del lunch nos escapamos un rato con los novios para hacer un reportaje de fotos en la Bodega Otazu entre los preciosos viñedos. Además, al ser una boda de otoño el el resultado no pudo ser mejor. La luz es más suave y el entorno da unos juegos de color impresionantes que se reflejan en las fotos con la pareja recién casada y el fantastico paisaje".
If you are looking for a charming setting to get married in Navarra, there´s no place like the Otazu Winery. In-between the Echarri mountains and surrounded by vast vineyards, the site has a welcoming atmosphere.
Today I´m getting you into one of those close and familiar events, where I had the chance to shoot Carlos and Graciela as their wedding photographer. The preparations started with each, Carlos at their parents´ house and Graciela in Otazu´s Farmhouse having her dress set with her family.
The ceremony started by mid day in a nearby chapel which is perfect for those couples wanting to get married in a church. It provides a warm perfect setting filled with history. And its vineyards leave plenty of room for inspiration. The Otazu Winery is really the best option for a family wedding.
After the ceremony, the guests were pleased with an outdoor lunch among the olive trees of its wonderful terrace, tasting the exquisite gastronomy of Navarra in beautifully arranged snacks. To close with a flourish, the air was filled with live music which left the perfect aftertaste for the evening.
While the guests were greeted with the lunch, we got away with the couple to shoot our report in the fantastic vineyards. Being an autumn wedding, the result couldn´t have been better. The light is softer and the settings allow an impressive palette of colours out of this amazing landscape that reflect on the newly wed couple.